La Enfermedad de Parkinson, temblores y otros trastornos de movimiento se pueden tratar de forma eficaz mediante el implante de electrodos cerebrales en aquellos pacientes que no responden de manera adecuada al tratamiento farmacológico.
La técnica se denomina estimulación cerebral profunda.
Mediante la conexión de los electrodos a un generador implantado en el tejido subcutáneo se puede corregir la actividad alterada de diferentes circuitos neuronales relacionados con estas enfermedades.
La implantación de los electrodos se realiza mediante cirugia estereotáxica. Es una técnica que permite implantar los electrodos con una precisión milimétrica. La utilización de sistemas de planificación tridimensional de última generación y tractografía (ver fotografía) permite el implante de los electrodos de forma aún más precisa así como disminuir el riesgo de complicaciones.
El empleo de electrodos direccionales permite dirigir y fraccionar la corriente para disminuir al mínimo los posibles efectos secundarios.
La diana utilizada en la enfermedad de Parkinson suele ser el núcleo subtalámico. También puede utilizarse el núcleo pálido interno en pacientes seleccionados. El núcleo pálido interno suele ser la diana habitual en pacientes con distonia, mientras que el implante de los electrodos en el tálamo se utiliza en los pacientes con temblores.
Es un tratamiento de la enfermedad Parkinson eficaz, seguro con un porcentaje muy bajo de complicaciones y efectos secundarios.
Tratamientos:
Implante de dispositivos de estimulación cerebral profunda recargables